miércoles, 17 de febrero de 2010

América Latina está que arde

América Latina se está calentando. Al menos es sería lo más destacado del informe de la ONU "Objetivos de Desarrollo del Milenio: avances en la sostenibilidad ambiental de América Latina y del Caribe" , que alerta sobre tasas de deforestación galopantes, superiores en el doble a las mundiales.

El tema no es baladí. Va a ser uno de los que estén seguramente en el centro de las discusiones sobre cambio climático de la próxima Cumbre de la ONU sobre el asunto, la que se desarrollará del 29 de noviembre al 10 de diciembre en Cancún (México).

México ha acogido otras conferencias de este tipo en el mismo destino. La gran ventaja para el anfitrión será la facilidad para aislar la zona de las discusiones, el palacio de Congresos, de los globalifóbicos debido a las características que tiene la zona hotelera de Cancún, un corredor largo y estrecho, lleno de grandes hoteles de grupos turísticos internacionales, a los que no se puede acceder más que por una carretera que es sencilla de estrangular. Lo sustantivo de la cita quedará para otro momento pero por ahora advertir que esa cumbre será un búnker en el que habrá muy poca presencia operativa de la sociedad civil...

lunes, 15 de febrero de 2010

Luis Cernuda vive en México, para siempre

Visitó estos días Ciudad de México Antonio Rivero Taravillo, un biógrafo apasionado del poeta sevillano y universal Luis Cernuda (1902-1963). Cuenta Rivero que vino a empaparse del personaje para sentir de cerca por qué se instaló en México en los últimos años de su vida. Sin duda su amistad con el malagueño Manuel Altolaguierre y su esposa, Concha Méndez, debió ser decisiva, pero también la afinidad de Cernuda con Octavio Paz, un escritor a quien había conocido en el congreso de escritores de Valencia de 1937.

Cernuda, dice el biógrafo, vino a México a sabiendas de que era el viaje definitivo, y se instaló en la pequeña Andalucía de la capital mexicana, el barrio de Coyoacán, un rincón que, en el contexto de masificación, saturación de tráfico y tráfago de la ciudad, aún conserva ritmos distintos, pausa, bardas floridas, color, belleza...

La ciudad de México es buena para esconder la hermosura de su gente pero Cernuda encontró en ella el amor a Salvador Alighieri y también a la lengua. Así lo entiende el industrioso biógrafo que está por sacar el segundo libro dedicado a Cernuda, esta vez centrado en sus años sevillanos tras haber dedicado unos años a los españoles (1902-1938).

sábado, 13 de febrero de 2010

Yasunari Kawabata: paseo por Kioto

Literatura cerrada. Pocos personajes, insularidad japonesa. Kamakura y Kioto, las ciudades donde Kawabata sitúa la trama. La primera fue el lugar donde él vivió y perdió la vida. Suicidio sin explicaciones. También donde donde se refugia Oki, un escritor con cierto reconocimiento, en una vida sin amor, en una existencia que se está agotando y necesita revivir en momentos pasados.

La historia está llena de intenciones, de viajes y encuentros simbólicos, poca acción, más reflexión y pensamiento. Es un estilo pesado, estética pura, detalles precisos de un momento, de un encuentro, de un estado de ánimo... Descripciones extraordinarias sobre un obi (cinturón del kimono) o del dibujo y los colores de los estampados de cada prenda.

Es ahí donde explota Kawabata, un escritor fascinante, que alimenta esa literatura japonesa vuelta sobre Japón. Cierto enclaustramiento, búsqueda de lugares particulares, un jardín especial, el palacio del musgo, el sentido de un jardín zen, una tarde concreta, con sus tonos naturales y colores, un camino en la montaña.

Hay una estética del gusto pero con cierto esfuerzo, equilibrios muy cortos, momentos perecederos que se escapan deprisa. El libro se parece a un paseo por los templos de Kioto en alguna época propicia, octubre quizás. Los protagonistas están en la hermosa ciudad en diciembre, momento de mucho frío, fría relación, pasado, recuerdo, dolor, duda. Giros lingüísticos particulares de la gente de la urbe, que habla sobre el clima, que oculta más que dice aunque las palabras sean lo que más se ve. Es una literatura en estado puro, personal, unida tan de cerca al lugar que conozco, que te hace sentir allí otra vez...

Slim for NYT president!

El empresario mexicano Carlos Slim, el segundo o tercer hombre más rico del mundo, acaba de comprar nuevas acciones del New York Times. Se ha convertido en el segundo mayor accionista del prestigioso diario con el 16,3% de los títulos, sólo superado por el 19% de la familia Ochs-Sulzerberg, la que controla el periódico desde fines del siglo XIX. Al magnate le sobra "lana" y su víctima esta vez ha sido posiblemente el diario de más alcurnia de Estados Unidos.

Si en el pasado los medios de comunicación fueron exponentes del pluralismo y adalides de las libertades, en este momento la operación se convierte en una puñalada por la espalda a ese tipo de principios. La información de hoy es negocio, cada vez con menos sentido público. Capturar audiencias es sinónimo de comprar consumidores, facturar publicidad, entretener antes que formar o enseñar, antes que hacer pensar... ¡Peligro!

¿Por qúé? Quizás porque los periodistas del NYT llevan meses preguntándose por qué el tercer hombre más rico del mundo no quiere canalizar parte de su inmensa fortuna a la filantropía. Posiblemente porque buena parte de la obra social que promueve representa demasiado poco en comparación con lo que él toma de la sociedad donde se inserta. Puede que porque el NYT sea un excelente negocio en tiempos de crisis, y quiera convertirlo en lanzadera de un nuevo gran proyecto de comunicación en EEUU.

Así es Slim, un ciudadano espectacular, imprevisible, un orgullo para México quizás, por lo que ha logrado solo... ¿Solo? Leí hace tiempo que un renombrado filántropo estadounidense contaba que parte de los millones de dólares que destinaba a sus proyectos eran la muestra de agradecimiento a una sociedad que, dentro de las reglas existentes le había permitido amasar una inmensa fortuna... En el caso de Slim es un hombre al que le ha ido bien, que seguramente ha luchado y trabajado mucho pero al mismo tiempo se ha aprovechado de los huecos, deficiencias, inconsistencias legales y dinámica de un gran país en vías de desarrollo, México, donde la ley no depende de principios sino de voluntades. Algunos elogiaran el pragmatismo y la visión del magnate; a mí me parece que lo que representa es de nuevo los excesos del capitalismo feroz, más feroz todavía en países con Estados débiles y una de las regiones del planeta, América Latina, con unos escandalosos índices de desigualdad que pocos gobiernos se atreven a combatir...