miércoles, 30 de enero de 2013

Cassez, libre pero ni culpable ni inocente

La ciudadana francesa Florence Cassez fue liberada hace pocos días en México y enviada a Francia. No fue declarada culpable ni inocente de secuestro, pero un grave error procesal permitió que el Supremo mexicano la dejara libre tras siete años encarcelada. Hace dos años y medio entrevisté a Cassez y para hablar de su situación. Siempre insistió en que era inocente, algo que nunca sabremos. Por el interés que cobró el caso reproduzco ahora un extracto de aquella conversación que nunca vio la luz. Este día la francesa habló del tema con medios franceses:

Francesa condenada admira a la colombiana Ingrid Betancourt y está agradecida con la periodista mexicana Lydia Cacho (JUNIO DE 2010)

La francesa Florence Cassez, quien cumple en México una condena de 60 años de cárcel por secuestro, declaró hoy que admira a la colombiana Ingrid Betancourt y que está agradecida con la periodista mexicana Lydia Cacho, quien, sin conocerla, abordó su situación en un artículo publicado en mayo.
En una entrevista telefónica Cassez dijo que su situación no es comparable con la que vivió la colombiana Betancourt pero ambas tienen algo en común: "las dos fuimos secuestradas".
Cassez se refirió a unas declaraciones de Betancourt, quien el 24 de septiembre del pasado año, en una gala celebrada en Montreal (Canadá), pidió públicamente "un juicio imparcial" para Cassez.
"Yo pienso que peor que la ausencia de justicia y el hecho de no encontrar a los culpables, peor que eso, es condenar a inocentes. No lo olviden, Florence Cassez también nos necesita", sostuvo entonces.
La francesa fue detenida el 8 de diciembre de 2005 por policías, que la retuvieron sin presentarla ante un juez un día y al siguiente, hicieron un montaje con la simulación en vivo, ante las cámaras de televisión, de su rescate.
Por su parte la ex aspirante presidencial colombiana permaneció en manos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), de 2002 a 2008.
"Es una mujer que me impactó, su corazón, su sensibildiad, su calma, su madurez...", explicó Cassez, quien tras conocer el apoyo que le había brindado Betancourt le escribió una carta de agradecimiento, cuyo contenido no ha hecho público.
También extendió su gratitud también Cassez a la periodista mexicana Lydia Cacho, quien el pasado 20 de mayo escribió una columna en el periódico El Universal que tituló "Lo que oculta Calderón".
"No la conozco y tomó partido", explica Cassez, quien tiene consigo una copia de la columna de opinión donde Cacho afirma que "Cassez es ya un símbolo en Francia, no por lo que mostró la autoridad mexicana en los medios, sino por lo que parece querer ocultar".
En el artículo la periodista, reconocida por su activismo en favor de las mujeres y contra las mafias de la pederastia, se pregunta por qué el presidente Felipe Calderón se ha opuesto a que la joven purgue su pena en Francia, algo que permite la Convención de Estrasburgo, ratificada por México e invocado por Francia, que mantiene reservas a un artículo.
Éstas constituyen "un impedimiento para garantizar que Florence Cassez purgue la totalidad de su pena en territorio francés", según el Gobierno mexicano.
Cacho recuerda que el sistema de justicia penal en México es inoperante, víctima de las "incapacidades y la corrupción de las procuradurías (fiscalías)", lo que ha motivado una aplicación de la justicia deficiente.
"Digamos que ya nos acostumbramos (en México) al perverso juego de la justicia diferida, la protección de los verdaderos culpables, y el doble discurso presidencial sobre el crimen y el castigo. Pero en Europa apenas están descubriendo esta realidad atroz", apuntó Cassez desde el Centro Femenino de Readaptación Social de Tepepan, en el sur de la capital mexicana.
Finalmente la presa francesa Cassez se dijo también muy agradecida con el presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, quien repetidamente ha pedido al presidente Calderón, de México, que permita que Cassez sea repatriada para que cumpla su condena en Francia.
"Políticamente él me defiende bien, muy bien (...) Qué bueno, qué suerte, qué afortunada. Toda mi vida estaré agradecida con eso", agregó Cassez.



miércoles, 23 de enero de 2013

Carrillo Salcedo, "campesino del Guadalquivir"

El internacionalista español Juan Antonio Carrillo Salcedo falleció el pasado 19 de enero en Sevilla, la ciudad donde enseñó con generosidad muchos años. Era un maestro en derechos humanos, como se lo reconocieron importantes amigos. Fue un profesor enorme, generoso y conciso, curioso, rotundo cuando tenía las ideas claras, o sea, siempre.

Conoció algunas de las sentencias más importantes del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) en los años en que pasó por esa institución. Tras estar en el exterior regresó a Sevilla, donde era uno de los profesores más prestigiosos de la Universidad Hispalense.

Era un hombre cabal, serio pero a la vez claro. Tenía una ética de hierro y se consideraba a sí mismo un "campesino del Guadalquivir".

En lo personal, acrecentó mi curiosidad por los derechos humanos, a cuyo estudio he vuelto hace poco. Sé que siempre estará en mi recuerdo. Mi tesis tendrá una dedicatoria para él.